Decana de las instituciones de la ciudad, la Sociedad Italiana es un pedazo del país europeo emplazado en el corazón de Ensenada. Durante el gran proceso migratorio de fines del siglo XIX, los italianos que llegaron en barco a estas tierras decidieron fundar una institución que los nuclee.
El 1 de marzo de 1891, un grupo de sesenta y dos inmigrantes residentes en Ensenada tomaron la decisión de fundar la Societá Operaria Italiana, la que años más tarde pasó a denominarse Sociedad Obrera Italiana de Socorros Mutuos, Social y Cultural de Ensenada.
Desde sus inicios hasta hoy funcionó en el mismo lugar. Con sus propias manos, los socios fundadores construyeron en calle La Merced N° 211 el emblemático edificio que los representa y actualmente sigue en pie, siendo declarado Patrimonio Cultural de la Provincia de Buenos Aires.
Entre los primeros dirigentes de la institución surgió la iniciativa de crear un cuerpo de bomberos voluntarios porque la totalidad de las casas eran de madera y chapa; fue así que un sector del inmueble de La Merced se convirtió en el primer cuartel de bomberos voluntarios de la provincia de Buenos Aires y el segundo del país, después del de La Boca. Allí funcionó hasta la década del ´50.
Desde su fundación, la Sociedad Italiana fomentó la creación de un hospital y una obra social que cubriera las necesidades básicas de sus miembros. También se promovió la construcción de un panteón en el Cementerio y se apuntó a la creación de una escuela italiana que formara a sus hijos en un ámbito en el que no se perdieran las raíces italianas.
Los italianos escapaban del hambre y las guerras con pocas pertenencias pero con una gran capacidad de trabajo. Hacia mediados del siglo XX la Sociedad Italiana llegó a tener unos 5 mil asociados, dato que refleja la dimensión de las fuertes camadas de inmigrantes que desembarcaban en el puerto local. El 80 por ciento provenía del sur de Italia.
Franco Torchia (presidente) y Giuseppe Pípola (vice) fueron dos de los italianos que desembarcaron en la región y consideran a la Sociedad como su segunda casa, siendo el resultado del deseo de progreso de las oleadas de inmigrantes. Giuseppe (94) arribó en 1947 tras la Segunda Guerra Mundial, cuando Juan Domingo Perón selló un acuerdo con autoridades italianas que facilitó la llegada de un millón de inmigrantes.
Hoy, con el paso del tiempo, las raíces siguen más fuertes que nunca entre sus miembros. De todos modos, aseguraron que hace falta aire juvenil para lograr el trasvasamiento generacional tan deseado, por eso aprovecharon este medio para invitar a bisnietos, nietos e hijos de italianos a formar parte de la vida activa de la Sociedad.
Actualmente la actividad central es Idioma Italiano, aunque también hay otras disciplinas para atraer a la juventud, como Reggaetón, Música, y Danzas Árabes.
En sus 127 años de vida, la Sociedad transitó varias épocas del país, subsistiendo a las peores tormentas. Sin embargo, en la década del 90, una fatalidad la dejó al borde del remate: una persona falleció durante un evento, lo que llevó a su familia a iniciar un juicio millonario contra la institución. Tras 17 años de proceso judicial, el fallo fue desfavorable y todo indicaba que el histórico establecimiento iba a tener que poner un candado definitivo en su portón de ingreso. Sin embargo, la Gestión del Intendente Mario Secco decidió colaborar para saldar esa deuda, entendiendo la importancia de esta gran institución.
El Domingo a las 21 horas en el canal de cable local saldrá la historia completa de la Sociedad Italiana en el Municipal TV.
Desde la Municipalidad, seguiremos recorriendo todos los clubes de la Ciudad con el objetivo de dialogar con los protagonistas y dar a conocer el gran trabajo que realizan en cada barrio. Desde esta Gestión, siempre apoyamos y valorizamos el rol social, deportivo y cultural de cada institución. En esta ocasión, compartimos la galería fotográfica de la Sociedad Italiana y en breve publicaremos el video, donde se visualiza el ritmo de esta histórica institución. Seguimos la recorrida…